Swan Song

Spoilers sobre el episodio S05E22 de Supernatural.

Con este episodio se pone final a la historia que creo Kripke, y aunque por desgracia no termina la serie (la CW quiere estirar el chicle y seguir haciendo pasta a costa del mejor show que han tenido y posiblemente tendrán en su historia, que evidentemente están en todo su derecho, pero no por ello deja de resultarme molesto) he tenido el gustazo de disfrutar de una season finale que perfectamente sirve como final para la serie, de hecho estoy pensando parar aquí y darla por finalizada, al fin y al cabo la historia que me enamoró se termina aquí, y para mi sorpresa de una forma espléndida, es todo un final, aunque al final del episodio se abre un poco lo que podría ser la continuación, no importa, la historia realmente ya ha acabado, y bueno, me daba miedo que no fuera así, pero habiéndola finalizando de forma tan excelente casi me da igual que la cadena quiera seguir con ella, porque los que queramos tenemos nuestro épico final y si así lo queremos podremos pararnos perfectamente aquí. Yo todavía no se lo que haré, pero si Kripke se baja del proyecto, posiblemente le siga.

El final de esta épica historia empieza con Chuck escribiendo el último capítulo, que tiene como personaje central al precioso Impala que siempre ha sido el hogar sobre ruedas de Sam & Dean, y con estas escenas que se iban intercalando en la historia, se nos iba preparando para esperar algo grande por parte del coche, y yo en una ida de olla, puestos a pensar en quien es Dios, me quedo con el Impala. Para algunos será Chuck (la personificación de los guionistas en la serie) para otros no habrá aparecido nunca por la serie, y para mí es el Impala xD. En cualquier caso, la decisión de que el episodio final este narrado por Chuck ha sido excelente, sobre todo cuándo nos habla directamente de lo jodido que es escribir un final. Y la historia en sí, es pura esencia Supernatural, ya desde el principio, con esa conversación entre Dean y Sam, la última que tienen en serio, y que de por sí te deja apreciar la épica de esta historia que esta a punto de finalizar. Aunque ya tenía los pelos de punta desde el clásico previo a ritmo de Kansas. Sam ingiere litros y litros de sangre demoníaca, y da el sí quiero a Lucifer. He de decir que me asustaba un poco ver a Jared interpretando a Lucifer, pero la verdad es que cumple bastante bien, y en todo momento se sabe cuándo es Sam y cuándo es Lucifer sin llegar a resultar una actuación demasiado forzada. El plan no funciona a las primeras de cambio y llega la batalla definitiva entre Lucifer y Michael. Magnífica la conversación que mantienen los dos hermanos, con Lucifer intentando llevar a Michael a su lado, el hijo rebelde contra el niño de papá, pero cuándo la batalla definitiva está apunto de empezar aparece Dean abordo del grandioso Impala y a ritmo de Def Leppard intenta hacer que Sam controle a Lucifer. Castiel se lleva a Michael por delante, y Lucifer acaba matándolos a el y a Bobby por meterse con su hermano. Y apunto esta de matar a Dean de una plaiza cuándo Sam ve en el Impala el soldadito que de pequeño pego en el cenicero, lo que desata una bomba emocional tanto para Sam como para el espectador, y se van sucediendo imágenes de los momentos que han compartido Sam & Dean. Es entonces cuándo Sam toma el control de su cuerpo y acaba saltando a la jaula de Lucifer mientras se lleva con el a Michael. Un final que te deja echo polvo. Castiel renace, cura a Dean y resucita a Bobby, después vuelve al paraíso. Y para la escena final Dean decide cumplir su promesa y parece que consigue algo que siempre quiso, tener una familia.

Es entonces cuándo se introduce lo que será el arco argumental de la siguiente temporada, aparece un Sam demoníaco para poner punto y seguido a la épica historia de los Winchester. Me ha parecido un final redondo, para una grandísima serie que siempre recordare con cariño, una historia familiar épica que ha terminado de forma excelente en mi opinión. Y sí habrá otra temporada, y puede que acabe viéndola, pero será un extra, un mero entretenimiento, una curiosidad, algo a parte. La historia termina aquí, y termina de forma grandiosa.